jueves, 16 de julio de 2009

Cómo convertir el agua en vino


¿ Te gustaría transformar el agua en vino? ¿O eres tan aburrido que prefieres transformar el vino en agua?:. Para realizar ambos experimentos solo se precisan dos vasos, una botella, y tres cositas que se compran en una droguería: una solución de indicador fenolftaleina, ácido sulfúrico diluido y disolución diluida de hidróxido de sodio. Debes llenar una botella con la solución de hidróxido de sodio. Esta es el agua.
Añade unas gotas de fenolftaleina a uno de los vasos de vino. Añade algo del contenido de la botella al vaso de vino. Revuelve la disolución para desarrollar un color violeta. Este es el vino tinto….pero no lo pruebes, mejor.
Echa ácido sulfúrico diluido a un segundo vaso. Echa la disolución del primer vaso de vino en el segundo. El color desaparece. El vino rojo se ha transformado en agua. Esta segunda parte no la hagas en una fiesta o los invitados te lincharán por dejarlos sin vino.
Otro experimento interesante es hacer que una botella de agua cambie de color azul a incoloro según como la sacudas. Llena una botella con 300 ml de agua destilada, 8 gramos de hidróxido de potasio, 10 g de glucosa y 6 a 8 gotas de colorante azul de metileno. Mezcla el agua con el hidroxido de potasio. Agítalos bien y agregale la dextrosa, y espera que se disuelva del todo. Añadele de 6 a 8 gotas de indicador azul de metileno. Agitalo y lo verás bien azul. Dejar el recipiente reposar hasta que la disolución se convierta en incolora.Si sacudes el recipiente, el color azul reaparecerá y lentamente se desvanecerá. ¡Felicitaciones, ya puedes ir a ofrecerte como mago para animar fiestas infantiles!

1 comentario:

camilo jiménez dijo...

muy bacano
te felicito
y si aprendi
a hacer vino
y a transformar el
vino en agua
gracias